Deja de engañarte.
Tú no trabajas muchas horas porque tienes mucho trabajo.
Tú trabajas muchas horas porque no delegas.
Y hay muchas razones para no delegar.
Muchas.
Pero la que probablemente se lleva la palma es la de la desconfianza.
Verás.
Hace aproximadamente un año me contrató un empresario para que le ayudara a organizarse, porque según él ya no daba más de sí.
Literalmente me dijo: “si no me ayudas voy a reventar”.
Y debo decir, que aunque por regla general los que me contratan son muy exagerados, en este caso vi que realmente estaba muy agobiado.
Pero lo entendí todo en la primera media hora de nuestra primera reunión.
Su teléfono no paraba de sonar.
Pero no paraba de verdad.
Yo creo que en esa media hora apenas pudimos cruzar 3 o 4 frases seguidas.
Le llamaban clientes, proveedores y empleados.
Era realmente molesto.
Lo curioso es que en la sala de al lado estaba su esposa, que hacía de administrativa, y a la que no le sonó el teléfono ni una sola vez en todo ese rato.
Y cuando por fin pudimos hablar sin que nada nos cortara, le pregunté que por qué atendía él todas esas llamadas y no se encargaba la administrativa (su esposa).
Él me dijo que sólo la tenía para que le llevase los números y que no sabría atender bien a los clientes.
Y a mi pregunta de que por qué no contrataba a otra administrativa más capaz, me dijo algo que me dejó patidifuso:
“Si mi mujer no es capaz de hacerlo bien, ¿cómo va a hacerlo un desconocido?”
A ver.
En este caso la solución fue muy fácil.
Sólo tuvimos que enseñar a su esposa, que por cierto era muy capaz, a atender las llamadas.
Al principio sólo las filtraba, pero al poco tiempo ya se encargaba de solucionar muchos temas.
Y lo que tú puedes sacar de esta historia, es que la solución a la desconfianza pasa por formar a tu gente.
Así que, o les enseñas, o trabajas más horas.
Lo que tú prefieras.
Si no sabes muy bien cómo hacerlo, o quieres que sea un proceso más rápido, contrátame una consultoría y en 90 minutos te doy las claves y el paso a paso.
En cualquier caso, deja de pensar que los demás no son capaces y haz que lo sean.
Disfruta del día!
Rafael Valero
PD – Asume que mientras no tomes la decisión de actuar como actúan los empresarios, el crecimiento de tu empresa será lento y doloroso