En esta entrada te voy a contar qué formación necesitas para ser empresario.

Porque seguro que te habrás preguntado alguna vez…

¿Ppor qué los resultados que obtienes de tu empresa no se corresponden con el esfuerzo que realizas?

Y es que, si eres como la mayoría de pequeños empresarios y emprendedores, seguro que te pasas la vida trabajando como un mulo.

Y cuando llega el final de mes, lo que cobras está muy lejos de lo que merecerías.

Al menos si nos basamos en la cantidad de horas que trabajas.

Pero si es así, déjame que te diga que lo más seguro es que sea porque te falta formación específica para ejercer como empresario.

Porque supongo que ya te habrás dado cuenta que ser experto en lo tuyo o en tu sector, no basta para gestionar eficazmente una empresa.

Así que si quieres saber exactamente qué formación necesitas para ser empresario y dirigir tu negocio con éxito, sigue leyendo.

 

 

Por qué no obtienes los resultados que esperas

Seguramente ya me habrás escuchado decir alguna vez, que prácticamente a ningún emprendedor nos dijeron, cuando empezamos nuestra andadura empresarial que, para ser empresario y tener éxito, no bastaba con ser experto en lo tuyo o en tu sector.

Sino que, por el conrario, hay que saber muchísimas cosas más. 

Y si te lo dijeron, seguro que por la emoción del éxito que ibas a tener, hiciste oídos sordos.

La cuestión es que esa falta de aptitudes empresariales, son las que hacen que te quedes mirando cómo la competencia avanza como un cohete.

Cuando tú, por muchas horas que dediques, y por muchas cosas que pruebes, no solo no avanzas, sino que, si te descuidas, vas hacia atrás.

Y es que, una buena parte de los emprendedores creen que ser un buen empresario consiste en ser muy bueno en su profesión o sector.

Es decir, que han de ser profesionales expertos en lo suyo. 

Cuando la realidad es que ser empresario ya es una profesión en sí y por regla general, no tiene nada que ver con cualquier otra profesión.

Sino que requiere de dominar una serie de aptitudes, que cualquier otro profesional, ni siquiera tendría por qué conocer.

Por otro lado, otra buena parte de pequeños empresarios creen que el motivo por el que sus empresas no funcionan es porque ellos no tienen estudios universitarios.

O porque se equivocaron al elegir, por ejemplo, una carrera de arte, en lugar de otra enfocada más a la gestión empresarial.

Pero déjame decirte que esto también es una soberana tontería.

Porque sino, cómo te explicas que gente como Steve Jobs con Apple, Amancio Ortega con Zara, Bill Gates con Microsoft, o Mark Zuckerberg con Facebook entre otros, hayan creado esos inmensos imperios empresariales sin tener estudios universitarios de ningún tipo.

Y la respuesta es bien simple y no, no es porque hayan tenido suerte. 

Sino que es más bien, porque sus esfuerzos en formación los orientaron a lo que de verdad necesitaban saber para gestionar una empresa. 

Pues descubrieron antes que la mayoría, que ser empresario es un trabajo que requiere de determinados conocimientos.

Que, por regla general no te dan ni en el colegio, ni en el instituto, ni en la universidad.

Aunque hayas elegido una carrera tan enfocada a la gestión de una empresa, como lo es la propia de administración y dirección de empresas.

Que esto que te digo no significa que no hayas de estudiar una carrera universitaria, ni mucho menos.

Pero lo que sí te digo es que la mayoría de esos estudios, por muy buenos que sean, lo más que te van a dar es una base bastante endeble para poder ejercer como empresario.

Y, en cualquier caso no te van a dar lo que de verdad necesitas para hacer que tu empresa despegue y te permita vivir como tú quieres.

 

Por qué no se forman los empresarios

Lo que yo te recomiendo es que, independientemente de que estudies o hayas estudiado una carrera universitaria.

Busques aquellas otras formaciones que te eduquen como empresario.

Porque el día a día de una empresa está bastante lejos de lo que reflejan la mayoría de los libros.

Ahora bien, obviando esto, aquellos empresarios que no están contentos con los resultados de su empresa y aún así no se forman, no lo hacen básicamente por 2 razones: 

 

Porque no tienen tiempo, pues se pasan todo el día trabajando como un empleado más de la empresa. 

Que estos, por mucho que quieran, mientras no tomen la decisión de dejar de actuar como un trabajador más, no van a poder solucionar nada.

Y si tú te ves reflejado en este grupo, te recomiendo que veas el vídeo que hice hace unas semanas, para que reflexiones sobre tu situación.

 

Porque no se forman, básicamente porque no saben en qué deberían hacerlo para mejorar su situación. 

Que de estos, los más motivados suelen optar al menos por aprender algo relacionado con ventas. 

Lo que pasa es que, aunque es una pata básica para el éxito de cualquier negocio, desde luego no es la única ni de lejos.

 

Qué formación necesitas para ser empresario

A continuación voy a contarte cuáles son, a nivel general, y sin entrar en demasiado detalle, las principales áreas que deberías dominar.

O, como mínimo, conocer sobradamente, para que gestionar y organizar tu empresa sea más fácil.

Tengas más posibilidades de lograr el éxito.

Y cuando quieras mirar a tu competencia, debas hacerlo mirando hacia atrás.

 

Marketing & Ventas

Y la primera de las áreas en que deberías prepararte es, sin ningún género de dudas, en marketing y ventas.

Porque como empresario has de estar siempre muy involucrado:

  • Tanto con el marketing, para averiguar y estar al día de lo que quiere tu cliente objetivo y así poder dárselo del modo más eficiente posible
  • Como con los procesos de ventas, para que, a través de técnicas y tácticas seas capaz de demostrarles que lo que ofreces, es la mejor opción.

 

Administración y finanzas

La segunda de las áreas que deberías tener bien controladas, es la que tiene que ver con la administración y las finanzas.

Para que sepas gestionar todo lo que a nivel administrativo se debe trabajar en tu empresa.

Así como para tener bien controlados los ingresos, los costes, los beneficios, las inversiones y, en definitiva, todo lo que rodea el tema de los dineros del negocio.

Porque aunque no necesitas ser un experto contable, ni mucho menos.

Sí que debes ser capaz de desarrollar la inteligencia financiera suficiente como para entender todo lo que pasa en tu empresa.

Pues si eres capaz de desenvolverte con soltura en el mundo de los números.

Seguramente podrás aumentar los ingresos del negocio, al serte más fácil buscar e interpretar la información necesaria.

 

Recursos humanos

La tercera de estas áreas, es la que tiene que ver con la gestión de los recursos humanos.

Pues las personas son, o serán, un pilar básico para el buen funcionamiento de tu empresa.

Y por eso, has de ser capaz de controlar sin problemas, todo lo que tiene que ver con la contratación, la formación, la organización y, por supuesto, con la motivación de los empleados.

Y asume desde ya, si es que aún no lo tenías claro, que tus clientes no son los que compran los productos o servicios que comercializa tu empresa.

Sino que lo son tus empleados. 

Así que esmérate en esta parte, porque de ello depende en gran parte el éxito de tu negocio.

 

Productividad

La cuarta área imprescindible en la que tienes que prepararte y mucho, es en la que tiene que ver con la productividad.

Tanto tuya a través de aprender métodos de organización personal y gestión de tareas.

Como de tu personal a través de procesos bien estudiados que les permita ser efectivos la mayor parte del tiempo que pasen trabajando.

 

Estrategia y desarrollo

Y la quinta y última área, es la que tiene que ver con la estrategia y el desarrollo del negocio.

Porque no te puedes limitar a vivir en el día a día y tienes que mirar hacia adelante.

Intentando siempre mejorarlo todo y hacer crecer el negocio. 

Porque, si no estás creciendo y alejándote de tus competidores, lo que estarás haciendo es decrecer y se te estarán acercando por detrás.

Pues es prácticamente imposible que te puedas mantener siempre en el mismo punto.

 

Otras aptitudes y capacidades

A parte de estas áreas imprescindibles, también hay una serie de aptitudes y capacidades que deberías desarrollar como empresario.

Para que el complicado trabajo de gestionar tu empresa sea más llevadero.

Como por ejemplo:

  • La capacidad para entender las relaciones laborales entre tú y tus trabajadores.
  • Ser capaz de marcar objetivos coherentes y crear los planes adecuados para su consecución
  • Saber organizar el trabajo a realizar, pensando no sólo en tu propio interés, sino también en las necesidades y capacidades del personal.
  • Comunicarte eficazmente, tanto de forma oral como de forma escrita, para que puedas transmitir tus ideas y decisiones utilizando el lenguaje más adecuado para cada situación.
  • Ser capaz para asumir la responsabilidad de todo lo que pase en la empresa
  • Saber adaptarte a las circunstancias de manera rápida, por muy chocantes o complicadas que te parezcan
  • Y la capacidad para gestionar en base los recursos que tengas disponibles, y de acuerdo a los criterios de productividad, rentabilidad y ahorro de tiempo

 

Como puedes ver, lo que necesitas dominar como empresario son muchísimas cosas.

Por lo que, cuanto antes empieces con aquellas que menos controlas, antes podrás mejorar tu situación.

 

Qué opciones de formación hay

Ahora bien, una vez que tomas la inteligente decisión de formarte, llega la típica pregunta de cuál es el mejor método de todos. 

Por eso, te voy a dar mi punto de vista, sobre cuáles son los pros y contras de los 4 métodos más habituales, por si eso te ayuda.

 

A base de «tortazos»

En cuanto al primero y más utilizado de los métodos, tenemos el de aprender a base de tortazos.

Que es con el que yo tuve que aprender durante al menos los 10 primeros años de mi vida empresarial.

Porque, entre otras cosas, por aquel entonces no había demasiadas opciones para formarte como empresario.

 

A favor: Lo que puedo decirte a su favor son dos cosas:

  • La primera que no hay mejor aprendizaje que el que vives en tus propias carnes.
  • Y la segunda, que con diferencia es el método más barato que existe.

 

O al menos en cuanto a percepción, porque si lo analizas verás que no solo no sale barato.

Sino que, a medio plazo resulta seguramente el más caro.

Y es que, mientras no sabes de lo que tienes que saber, estás perdiendo mucho tiempo y oportunidades.

Que si hubieras invertido en aprender, probablemente no te las habrías perdido.

Y la inversión se te habría retornado con importantes beneficios.

 

En contra: Además de lo que te acabo de decir sobre su coste, lo cierto es que es el que más tiene.

Porque es muy lento y, con diferencia, es el más doloroso de todas las opciones que tengas disponibles.

Pues para aprender has de tropezar una y otra vez

Porque, por regla general, cuando tropezamos la primera vez, como no estamos seguros de a qué se ha debido y volvemos a intentarlo.

 

Videos, blogs y resto de cursos sueltos

El segundo método más utilizado, es el de formarte a base de hacer cursos sueltos por ahí a medida que los vas necesitando.

Que aunque algunos los pagas, la mayoría suelen ser gratis. 

 

A favor: Sobre este método, lo mejor que te puedo decir, es que es barato.

 

En contra: Que al igual que el anterior, es muy lento.

Y por otro lado, el aprendizaje no siempre es el más adecuado.

Porque básicamente te están dando algo a coste cero, que de manera general tiene un precio.

Por lo que tampoco puedes esperar un máster en nada.

 

Escuelas de negocios

En cuanto al tercer método más utilizado, que es el de apuntarte a una escuela de negocios.

 

A favor: Lo mejor que puedo decirte es que en un mismo lugar vas a encontrar absolutamente todos los temas que necesitas aprender para la gestión de tu empresa.

Por lo que, solo por eso, ya podríamos darle una de las mayores puntuaciones.

 

En contra: Por contra, no todas las escuelas de negocios están orientadas a la realidad de un pequeño empresario.

Y, además, la mayoría suelen ser bastante teóricas.

Sin con tar con que, para acceder a ellas, tienes que hacer una importante inversión.

 

Mentores

Y el cuarto y último método y que además es el menos utilizado, es el de contratar un mentor.

 

A favor: Que lo mejor que tiene es que suele ser la opción más rápida.

Porque el mentor te lleva de la mano, convirtiéndose en una especie de socio externo, que se centra tanto en mejorarte a ti como en mejorar los resultados de tu empresa.

Pero además, trabajando justo en el punto en el que más lo necesitas en cada momento y evitando generalidades.

 

En contra: Pero por contra, tenemos que es, seguramente, la opción más cara con diferencia.

Y que, además, suele ser difícil encontrar uno, porque hay muy pocos entre los que elegir.

 

En definitiva, y como puedes ver, el que te formes es sólo cuestión de que lo decidas.

Porque está claro que opciones tienes unas cuantas. 

Y lo que más suele frenar, que es la inversión y el tiempo que le has de dedicar, créeme que no debería ser tu mayor preocupación.

Porque, al fin y al cabo, si pones de tu parte, va en tu beneficio y lo recuperarás con creces, tanto en dinero como en tiempo.

Porque aunque la empresa que gestionas ahora no tuviese éxito, lo que tú habrás aprendido a ser empresario.

Por lo que podrás utilizar ese aprendizaje en cualquier otro emprendimiento.

 

Conclusiones

Para finalizar, me gustaría decirte que yo, tras 30 años como empresario en distintos sectores y gestionando empresas con distintos tamaños.

Junto con los 6 años que llevo ya mentorizando empresarios.

He llegado a la conclusión de qué es lo que necesita concretamente un pequeño empresario para gestionar su empresa con éxito.

Y por eso, te propongo que agendes una sesión estratégica conmigo, completamente gratuita y sin ningún tipo de compromiso.

Para que charlemos durante un rato, y según el punto en el que esté tu negocio y lo que quieras conseguir, yo te pueda contar cómo puedo ayudarte a lograrlo.

 

Hasta la próxima.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *