No sé si a ti te pasa que, a veces, cuando vas a un restaurante te cuesta elegir qué comer.
Eso de que coges la carta y empiezas a revisarla y todo te apatece, o no, por igual.
A mí me pasa constantemente.
Y al final suelo acabar dejándome llevar por lo que me recomiende alguno de los comensales que me acompañen.
Aunque sepa que ellos no han pisado ese restaurante en la vida.
O la otra opción, si voy solo, es elegir algo que sé exactamente qué es.
Y no es que sea un indeciso.
O sí, no lo sé.
Es porque no sé qué quiero.
No me he parado a reflexionar ni por un instante qué me gustaría vivir en ese rato de restaurante, más allá de cubrir mi necesidad biológica de comer.
Así que acabo conformándome con lo que me den.
Bueno, pues esto que a priori es tan «simple», en el caso de tu empresa se convierte en algo muchísimo más serio.
Porque no saber qué quieres para ti hace que no gestiones tu empresa para ello.
Te dejas llevar, y a verlas venir.
Y esta es una de las razones principales por la que puede que no le encuentres sentido a tu negocio.
Ni te haga feliz levantarte por las mañanas para salir a «pelear» por tu empresa.
Sí que vendes. Sí que haces facturas. Sí que haces publicidad. Sí que delegas. Sí que…
Pero como no tienes un convencimiento exacto de qué es lo que quieres para ti, no sabes si la manera de gestionar tu empresa, en todo su amplio abanico, es la más acertada para que te lleve hasta donde quieres.
Y no vale como razón aquello de «ganar todo el dinero que sea posible».
Primero, porque una empresa no debe montarse nunca con un fin únicamente económico.
Y segundo, porque «ganar todo el dinero que sea posible» es demasiado ambiguo.
Además, que tu empresa gane todo el dinero posible no significa que tú lo estés ganando.
Tu empresa y tú sois entes completamente distintos.
En fin, lo que yo te recomiendo es que te pares un momento, una hora, o te hagas un retiro espiritual de fin de semana, si es que lo necesitas, y definas qué quieres para ti como persona.
Porque sólo si sabes lo que quieres, podrás trabajar para que tu empresa te lo dé.
Si no, te tendrás que conformar con lo que te dé.
Si quieres, puedes leer este artículo que escribí hace un tiempo, en el que amplío este tema y te doy ejemplos.
https://negociosperfectos.net/
Y si crees que lo que necesitas es una ayuda «más cercana e individual», contrata alguno de mis servicios y te ayudo a definirlo.
https://negociosperfectos.net/
Disfruta del día!
Rafa Valero
P.D. – Mañana más.